El líder del PRO, Mauricio Macri, convocó este martes a los principales referentes del espacio a la sede del partido en San Telmo con el objetivo de profundizar las negociaciones para un acuerdo electoral con La Libertad Avanza (LLA) en la provincia de Buenos Aires, de cara al armado opositor que busca disputarle el poder al peronismo.

La reunión duró cerca de una hora y media y, según informaron fuentes partidarias a Noticias Argentinas, se resolvió “profundizar el diálogo” con el espacio liderado por Karina Milei, pero también abrir la convocatoria a otras fuerzas políticas que promuevan el cambio en territorio bonaerense.

Aunque compartió la estrategia general, el expresidente dejó en claro sus reparos: "No todo vale", sostuvo en diálogo con la prensa, y reclamó “una alianza de partidos” que defina un proyecto, ideas y valores, además de nombres. En ese marco, apuntó contra Karina Milei y el armador libertario Sebastián Pareja, al afirmar que “al presidente no lo cuidan y le dicen cosas todos los días que no son acordes a la realidad”.

Además, Macri subrayó la necesidad de incluir a un sector del radicalismo encabezado por Maximiliano Abad, para consolidar un frente anti K que compita con fuerza en la provincia gobernada por Axel Kicillof.

Durante el encuentro en Balcarce 412, también se acordó convocar en dos semanas a los concejales bonaerenses del PRO, como parte de los primeros pasos hacia el armado electoral.

En la cumbre se reafirmó además el rechazo histórico del PRO a las reelecciones indefinidas de intendentes. Participaron del encuentro Cristian Ritondo, Diego Santilli, intendentes de peso como Guillermo Montenegro (Mar del Plata) y Ramón Lanús (San Isidro), así como diputados y senadores provinciales. Néstor Grindetti participó de forma virtual.

Tras la reunión, Macri se mostró en la ciudad de Balcarce junto al intendente local, Esteban Reino, y reafirmó su idea de que “si le va bien al Gobierno, le va bien a la Argentina”, aunque reiteró que cualquier alianza debe tener “límites claros”.

Por su parte, Cristian Ritondo, presidente del PRO bonaerense, valoró la voluntad del oficialismo de avanzar en un acuerdo:
“Cuando el Gobierno sienta en la mesa a Karina Milei o al propio Presidente, demuestra que hay intención real”, afirmó.

Sin embargo, fue enfático en marcar la autonomía del distrito: “La responsabilidad en la provincia la tengo yo. Macri acompaña, pero la estrategia bonaerense es nuestra”.

Con la vista puesta en las elecciones porteñas del 18 de mayo, que marcarán la primera pulseada entre el PRO y LLA, Ritondo cerró:
“La provincia de Buenos Aires necesita una alianza fuerte para ganarle al kirchnerismo. No especulamos, trabajamos desde el territorio”.