

Debido a la falta de combustible, el sector de la producción agropecuaria se vio afectado, por lo que convocaron una protesta en diversos puntos del país. Asociaciones y sociedades rurales señalan que a causa del déficit de nafta se han visto impedidas de continuar con la producción de bienes como el trigo y la soja.
Esto fue informado a través de un comunicado conjunto, titulado “Un campo sin gas oil o un país sin combustibles, es como un cuerpo sin sangre”, que cuenta con las adhesiones de las Sociedades rurales de San Pedro, Rojas, Baradero, Vedia, Suipacha, Colón, en lo respectivo a la Provincia de Buenos Aires. Además, desde regiones de Santiago del Estero se sumaron a la proclama.
“Los genios del desabastecimiento, primero de vacunas (Perdón... ¡Para ellos sí!) Insumos médicos, o artículos de primera necesidad en las ciudades para toda la comunidad ahora se le suma el combustible. La vida económica paralizada, y las máquinas y tractores sin poder trabajar”, informa el comunicado de las entidades agropecuarias.
“Antes que estar parados al lado del tractor hasta que lleguen los barquitos importados, salgamos a las rutas a expresar nuestra indignación”, reza la convocatoria.
Por su lado, el ex presidente y dirigente de la Sociedad Rural de San Antonio de Areco, Martín Vivanco, señaló: “Expresamos de alguna manera la sensación que hay acá en el sector agropecuario, los que somos usuarios intensivos de gasoil, y que es la sensación de toda la comunidad. Nos privan de insumos para la salud, ya no hay insumos básicos para una operación, en el país de los alimentos 40% de la gente tiene hambre y ahora no hay combustibles”. “Imagínese que un tractor consume por día 200 litros, ¿cómo se hace para vivir así, para trabajar?”, añadió.
El descontento de los productores rurales por la falta de combustibles en una época clave para algunos los principales cultivos industriales, teniendo en cuenta que están en marcha las labores de siembra de maíz y soja para el verano, se extiende entre las distintas agrupaciones.
Se calcula que el campo consume algo menos del 30% del gasoil del país, en sus distintas producciones. En ese sentido, la semana pasada Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Sociedad Rural Argentina (SRA) habían alertado sobre el desabastecimiento de combustible en varias zonas del interior del país.
“La falta de combustible en todas las provincias está provocando demoras en las labores agropecuarias, afectando seriamente la actividad del campo en el inicio de esta nueva campaña agrícola” y aseveró que “sin combustible no hay producción en el campo argentino”, afirma CRA en un comunicado.
Además, la entidad resaltó que “frente a la necesidad” que tiene el consumidor, “crece el abuso” por parte del mercado de los combustibles, motivo por el cual “los productores se ven obligados a pagar precios elevados en el mercado negro, lo cual le agrega un costo de producción y reduce los márgenes de rentabilidad” para la actividad agropecuaria.
Desde el ruralismo confederado comentaron que este tipo de dificultades en el mercado del combustible “genera un caos productivo: sea esto en la siembra, la distribución, el abastecimiento de alimentos y la vida de todos los días”. Por ello, plantearon que esto se suma a “la grave situación” que enfrenta la producción agropecuaria por “la falta de productos y/o insumos básicos” para el trabajo en el campo.
Por su parte, los transportistas mostraron su malestar: “La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) expresa su preocupación ante el creciente desabastecimiento de combustible, y solicita a las autoridades responsables, arbitrar medidas urgentes y concretas para revertir esta situación”.
“En agosto último, FADEEAC realizó la primera advertencia sobre el tema. Los reportes de varias de las 4500 Pymes que integran nuestras 44 Cámaras socias señalaban entonces diferentes tipos de dificultades para el normal abastecimiento de combustible: desde cupos para la carga y demoras, hasta falta de acceso a gasoil tipo 2 (el que mayoritariamente utiliza el sector) y limitaciones en el medio de pago aceptado”, agregaron.
“Es importante señalar que la imposibilidad de acceso al combustible en tiempo y forma impacta de modo directo en la productividad y rentabilidad de una actividad estratégica, que conecta poblaciones productivas con centros de consumo, y que por ende resulta vital para la economía y la competitividad de un país tan extenso y disperso como la Argentina, donde el 94% de las mercancías circula sobre ruedas”, continuaron.
“En medio de un contexto complejo, con un continuo incremento de los costos operativos y dificultades para acceder a varios insumos –neumáticos, repuestos para los camiones y hasta para acceder a unidades nuevas-, la falta de combustible amenaza ahora directamente con paralizar nuestra actividad y por lo tanto la economía del país”, finalizaron.