

El economista y potencial ministro de Economía, en caso de que Patricia Bullrich sea electa presidenta, Carlos Melconian, afirmó que el dólar oficial debería llegar a $500 el próximo lunes. La estimación del ex presidente del Banco Nación, durante la presidencia de Mauricio Macri, surgió del avance de la inflación desde que el Gobierno devaluó 17% al peso y fijó al tipo de cambio mayorista en $350 hasta las elecciones.
En dialogo con Radio Mitre, Melconian analizó el precio del dólar, en respuesta a la consulta respecto a si un dólar de $1.000 es caro o barato: La respuesta del economista fue que “depende de quien gane”, y que a Javier Milei el dólar a $1.000 no le alcanza para dolarizar.
En ese sentido, afirmó que el dólar oficial de $350 que fijó el Gobierno luego de las PASO es un dólar similar al de $60 que heredó el presidente Alberto Fernández de su antecesor, Macri. Si se tiene en cuenta la inflación y las actualizaciones que necesitará por ello, es un dólar “que se sinceró”.
Melconian sostuvo: “Acá Argentina está con un dólar que no sirve para nada y que no es relevante para nada, hasta ahí de 350 pesos oficial, y tiene el resto a mil pesos.” Además, indicó que “El tipo de cambio de 350 pesos al primero de agosto, ya fue modificado el 14 de agosto. Era un tipo de cambio como el que recibió Alberto Fernández de Macri, 60 pesos más o menos, y como que no se hubiera atrasado”.
“El lunes lo máximo que debiera ocurrir es que el Gobierno vuelva a poner el famoso 350 en un precio que sea el 350 más la inflación de agosto, más la inflación de septiembre, más lo que vaya de octubre. Y ese será un nuevo tipo de cambio que no va a asustar a nadie: da 500 pesos redondo”, comentó.
“El 23 de octubre 500 pesos. No es ni siquiera un pronóstico, es una cuenta matemática en base a la inflación”, añadió.
Asimismo, el economista abordó la necesidad de un programa económico integral: “Si entramos en un programa racional, en donde el programa tenga integralidad, es decir, tenga una reforma del sector público, tenga elementos regulatorios al sector privado, libere la fuerza para trabajar, empiece a alinear los precios relativos para lanzar un programa de estabilidad, y en el formato de nuevo mercado cambiario que tenemos en la cabeza, yo diría que es un tipo de cambio alto de miserabilidad para la Argentina”.
Por último, el economista planteó un escenario de transición, destacando la importancia de la planificación: “Nosotros acá nos presentamos con un programa sólido, posible, real, con la posibilidad de ser implementado tanto desde lo político como desde lo técnico y que no necesita ningún estallido previo.” Añadió que “sería extraordinario que después del 22 de octubre, si el ministro no entra en la segunda vuelta, esté dispuesto a sentarse para hablar estos sinceramientos.”
Además, el economista concluyó que la inflación y la necesidad de ajustes: “Todo el mundo sabe eso. Pero simultáneamente ha habido represión de precios, y ha habido precios que además de reprimidos, reaccionan con ese dólar oficial, por ejemplo, algunos alimentos, por ejemplo, combustible, por ejemplo, costo de la energía, que habrá que reconsiderar.”