

Luego de anunciar el envío de gendarmes, Anibal Fernandez recibió una gran cantidad de críticas por realizar esta operación sin aprobación previa. En torno a eso, uno de los cruces más picantes fue el que tuvo con el ministro de seguridad, Sergio Berni. " Es una persona a la cual todos lo queremos y respetamos pero Aníbal es Aníbal. Está peleado con todos, está peleado con él mismo" describió.
"Nosotros le decíamos “Aníbal, vas a ganar la interna y nos vas a hacer perder la provincia de Buenos Aires”. En esa soberbia que lo caracteriza no quiso escuchar", señaló. El resultado ya se conoce: "Perdió con quien en ese momento era una desconocida para la Provincia, y no fue el espacio político porque el candidato a Presidente sacó más de 400 mil votos de diferencia. A partir de ahí, Aníbal está muy enojado con la provincia de Buenos Aires, está resentido. Y no se puede gestionar con rencor", agregó.
Ya refiriéndose al tema en cuestión, fue claro: "entiendo que lo hizo sin querer, pero contestar lo que contestó al Gobernador me parece totalmente desubicado. En cualquier país civilizado ya estaría interpelado, porque no le faltó el respeto al Gobernador, le faltó el respeto a los bonaerenses. Con la provincia de Buenos Aires no se jode. Aníbal Fernández con la provincia de Buenos Aires no se jode".