

El programa de facilidades, que contempla la quita total de intereses, multas y punitorios, abarca deudas vencidas al 31 de diciembre de 2019 —tanto en estado judicial como prejudicial—, planes de pago caducos y vigentes. Comprende a los impuestos Inmobiliario, Básico y Complementario; Automotores; Ingresos Brutos y Sellos.
Los beneficios son importantes, a punto tal que en algunos casos la condonación puede alcanzar el 70% del monto total adeudado. El plan permite pagar en un plazo de hasta 10 años —120 cuotas— con un interés fijo, o bien en 3 cuotas sin intereses de financiación.
En el caso de los contribuyentes que posean deuda en instancia judicial, también prevé el levantamiento automático de los embargos con la sola adhesión al programa.
La suscripción se realiza por internet y los beneficios se encuentran segmentados de manera progresiva por tamaño y tipo de empresa, haciendo una distinción entre las que son micro, pequeñas y medianas.
Respecto de la medida, en su cuenta de Twitter el director de ARBA, Cristian Girard, explicó: “En el marco de la pandemia de COVID-19, y en virtud de la política de aislamiento preventivo social y obligatorio, decidimos extender la vigencia del plan de pagos para pymes aprobado en el marco de la ley de emergencia sancionada en diciembre por la Legislatura”.
Si bien subrayó que “atravesamos hoy el embate de una pandemia”, Girard hizo hincapié en que fueron “las políticas económicas desplegadas por los gobiernos del PRO y sus aliados las que dejaron miles de pymes quebradas”.