

El presidente Alberto Fernández mantuvo un almuerzo de trabajo con su par uruguayo, Luis Lacalle Pou, en la residencia presidencial de Parque Anchorena, en la ciudad de Colonia, en el marco de su visita al país vecino.
“Fue una muy buena reunión. Pudimos hablar distendidos sobre los problemas de la región en general y de Argentina y Uruguay en particular”, expresó Fernández.
Y afirmó: “Los dos sentimos que debemos hacer mucho más profundo el vínculo y la relación de nuestros pueblos. También creemos que hay que trabajar juntos para que la región vuelva a unirse, respetando la diversidad ideológica y haciéndonos fuertes en un mundo que se globaliza. Estamos convencidos que juntos podemos aportar mucho a este objetivo.”
Apenas le informaron que su segundo hisopado era negativo y que ya no estaba obligado a mantenerse aislado, el Presidente viajó rumbo a Colonia en helicóptero acompañado únicamente por su vocero Juan Pablo Biondi. El encuentro entre los dos presidentes -que sorprendió porque no figuraba en la agenda de actividades oficial- se venía conversando desde principios de año y tuvo un par de postergaciones hasta que la pandemia dejó todo en veremos.
Fernández es amigo del canciller uruguayo Francisco Bustillo, que fue embajador en Buenos Aires cuando él se desempeñaba como jefe de Gabinete de Néstor Kirchner. Quien estaba al tanto de estas conversaciones era el embajador en Montevideo, Alberto Iribarne, otro amigo personal de Fernández que participó ayer del encuentro.
Alberto Fernández y Lacalle Pou asumieron que la primera tarea conjunta será encontrar un punto de contacto en el Mercosur, que sufre el zigzag constante de Jair Bolsonaro, presidente del Brasil. Bolsonaro está a la derecha de Lacalle Pou, rechaza el Acuerdo de Cambio Climático de Paris y su política exterior se había plegado a Trump.
Los dos mandatarios conversaron sobre la ventana geopolítica que se abre en la región con la llegada de Joseph Biden a la Casa Blanca. Biden tiene posiciones más diplomáticas con Venezuela y Cuba respecto a Trump, y sus asesores en América Latina ya han dejado trascender que busca una agenda común regional con el Mercosur, la OEA y el BID.