A partir de una modificación al Código Fiscal, el gobierno bonaerense podría empezar a cobrar una alícuota del 9% de Ingresos Brutos a las operaciones financieras vinculadas a bonos y títulos emitidos por el Gobierno Nacional.
La resolución, incluida en el proyecto de Presupuesto para la provincia de Buenos Aires, implica eliminar una exención vigente desde años en la provincia y generó críticas inmediatas desde la oposición al actual gobierno de Axel Kicillof.
La novedad cobró fuerza hoy luego de que el diputado del PRO Matías Ranzini denunciara la medida en redes sociales, acusando al gobierno provincial de “recaudar más a toda costa a expensas de encarecer el financiamiento del sector privado”. Según el legislador, el cambio podría trasladarse a mayores costos para inversores y empresas que operan con activos del Tesoro.
La modificación aparece en el artículo 99 del proyecto de Presupuesto y deroga una parte del artículo 207 inciso c del Código Fiscal, que hoy exime del impuesto a las operaciones con títulos públicos emitidos por la Nación, las provincias, la Ciudad de Buenos Aires y los municipios, así como a las rentas asociadas. Con la nueva redacción, las entidades financieras quedarían alcanzadas por el tributo cuando operen con bonos o instrumentos emitidos por el Estado nacional, tanto actuales como futuros.
El cambio, sin embargo, mantiene la exención para títulos públicos emitidos por la provincia de Buenos Aires y por otras jurisdicciones subnacionales. En los hechos, esto significa que las operaciones con deuda bonaerense o provincial seguirán sin pagar Ingresos Brutos, mientras que las relacionadas con instrumentos nacionales sí serán gravadas.
Aunque la medida está dirigida a entidades financieras, la excepción no alcanza a agentes de bolsa ni a intermediarios bursátiles, que continuarán operando sin pagar el impuesto en estas transacciones. 
La discusión legislativa ocurre en paralelo al debate por el endeudamiento solicitado por Kicillof, que recibió dictamen y podría ser tratado este miércoles en ambas cámaras. El gobernador también volvió a reclamar la aprobación de un fondo para municipios y publicó nuevos números para presionar al parlamento.