

La Ciudad de Buenos Aires atraviesa el peor registro de personas en situación de calle desde que existen mediciones oficiales. Según datos del Instituto de Estadística y Censos porteño (IDECBA), la cifra trepó de 3.560 en abril de 2024 a 4.522 en mayo de 2025, lo que representa un aumento récord del 27%.
Desde el propio relevamiento advierten que el número de gente durmiendo a la intemperie “alcanzó el valor más alto de la serie exhibida”.
Sin embargo, pese a la contundencia de las cifras, el ministro de Desarrollo Humano y Hábitat, Gabriel Mraida, relativizó el alcance del problema y trasladó la responsabilidad a la Provincia de Buenos Aires.
En diálogo con Radio Rivadavia, Mraida afirmó: “Hace un año hicimos un censo y registramos que hay 60 chicos de CABA viviendo en la calle. El 70% de los que vemos vienen de la Provincia. Es necesario que el Gobierno bonaerense ponga manos a la obra”.
Este diagnóstico de la Ciudad no coincide con el 3° Censo Popular de Personas en Situación de Calle, realizado por organizaciones sociales, que estimó en 11.890 la población total sin techo en la Ciudad, un 64% más que en 2019. Del total, el 38% quedó en la calle en el último año, lo que evidencia la aceleración de la crisis.
“Responsabilizar a otra jurisdicción es desconocer las causas estructurales del problema”, señalaron desde el Centro de Estudios Metropolitanos (CEM), que vincula el fenómeno con la crisis habitacional y económica, la desregulación de los alquileres y el aumento de desalojos. “Factores que no distinguen domicilios de origen”, remarcan.
Aún así, el ministro insiste en su postura y defiende la red de paradores de la Ciudad —“tenemos 50 paradores, dan las cuatro comidas”—, pero el máximo histórico de personas durmiendo en veredas pone en cuestión la efectividad de esas políticas.
La situación también se enmarca en el retiro del Gobierno nacional: según el CELS, la decisión de transferir la problemática a las jurisdicciones “rompió con el espíritu de la ley nacional, que buscaba políticas coordinadas en lugar de una mera derivación”.