

Durante el primer año de gestión de Javier Milei, la deuda pública consolidada de Argentina se redujo en USD 24.798 millones, pasando de USD 491.634 millones a USD 466.836 millones, según un informe publicado por la Fundación Libertad y Progreso. Esta disminución representa un descenso del 5% con respecto a noviembre de 2023 y es atribuida a un reordenamiento fiscal y monetario que apunta a estabilizar la economía.
El análisis incluye tanto la deuda del Tesoro como la del Banco Central de la República Argentina (BCRA). Aunque la deuda bruta del Tesoro aumentó en USD 41.130 millones durante este período, esta suba fue compensada con la reducción de USD 65.927 millones en la deuda del Banco Central, lo que permitió sanear sus cuentas y frenar la emisión descontrolada que alimentaba la inflación.
Reorganización fiscal y monetaria
En su informe, la Fundación Libertad y Progreso explicó que, durante la gestión anterior, el BCRA había recurrido a la emisión monetaria para financiar al Tesoro, generando un esquema insostenible. Para retirar los pesos emitidos, el Banco Central acumulaba deuda remunerada que pagaba intereses elevados al sistema financiero. Hacia fines de 2023, esta dinámica obligaba al BCRA a emitir el equivalente al 24% de la base monetaria mensual solo para cubrir los intereses de su deuda.
El gobierno de Milei implementó un mecanismo de reestructuración: el Tesoro asumió parte de la deuda del Banco Central mediante el canje de los Pases Pasivos por Letras Fiscales de Liquidez (LeFis). Esto permitió eliminar la deuda remunerada del BCRA y, con ello, frenar la emisión para pago de intereses, un factor clave en la lucha contra la inflación.
Impacto en el déficit fiscal
El Economista Jefe de la Fundación, Eugenio Marí, destacó que este reordenamiento tiene como pilar el control del déficit fiscal. "La deuda es la contracara del déficit fiscal. Sin déficit, la deuda se reducirá en términos reales y como porcentaje del PBI", afirmó.
Además, subrayó que un menor déficit facilita el pago de la deuda y mejora la percepción de riesgo del país, lo que podría abrir la puerta a un regreso de Argentina a los mercados internacionales de crédito en 2025.
Perspectivas económicas
El informe señala que estas medidas han contribuido a estabilizar la economía, aunque todavía persisten desafíos significativos. Según Marí, el éxito a largo plazo dependerá de mantener un equilibrio fiscal sostenido y de avanzar con las reformas estructurales necesarias para consolidar la confianza en el sistema económico.